Factores que marcan el trabajo en 2023
Parte I
El mundo laboral viene experimentando cambios acelerados. Mientras las organizaciones deben actualizarse según los últimos avances para poder competir, las personas deben mantenerse al día con habilidades que las mantengan como talentos competentes para poder optar por las mejores oportunidades.
Actualmente las habilidades de empoderamiento toman la delantera frente a las conocidas habilidades blandas, y esto junto con el trabajo nómade, son algunos de los retos de esté 2023. Las tendencias que marcarán el mundo del trabajo este año que se está iniciando con flexibilidad, trabajo por objetivos, brecha de habilidades y escasez de talento, trabajos freelance y por proyectos, valores y sentido de propósito, diversidad e inclusión, clima interno, inteligencia artificial, seguridad laboral y el eje en las personas son las más destacadas.
“Desde las cambiantes preferencias laborales de los trabajadores, hasta un contexto económico signado por una mayor incertidumbre, pasando por el avance de la transformación digital, los factores que inciden en un mercado laboral en transformación plantean grandes desafíos de cara en esté año.
Desde esselección te mencionaremos algunos factores de importancia en el área:
Importancia en ascenso de la flexibilidad:
En la continua búsqueda del equilibrio entre vida profesional y personal, la flexibilidad laboral en todas sus variantes continúa cobrando relevancia. Para la gran mayoría de los trabajadores resulta de vital importancia poder decidir desde dónde trabajar, en qué momento y cuántas horas al día, pudiendo intercalar responsabilidades profesionales y personales a lo largo de la jornada. Esto supone para las organizaciones establecer arreglos de formatos y esquemas de trabajo uno a uno, alineando las necesidades de la organización con las del talento, señalaron.
Estamos en un momento en el que las empresas deberán definir cómo interpretan la hibridez, considerando el entorno físico y digital, complementarios y cuáles serían las razones reales por las cuales la interacción presencial podría generar una propuesta de valor significativa. ¿Estar presente en la oficina hoy suma valor? Es lo que hay que revisar”.
También las normativas deberán cambiar. “Frente a la evidencia de que los gigantescos edificios corporativos, actualmente no son tan necesarios como antes, surgirán en 2023 encuadres de nuevas leyes laborales que, hay que decirlo, siempre llegan más tarde de lo deseable. La tendencia es que, como vivimos en un mundo híbrido, a veces presencial, a veces a distancia, y nómade —muchos roles se pueden ejercer desde cualquier lugar del mundo—, ya no es posible convivir con normas que quedaron obsoletas”.
Triunfo del trabajo por objetivos:
Para la organización de recursos humanos, sin dudas este ha sido uno de los grandes legados que ha dejado la pandemia en el ámbito laboral, que ha derribado el viejo paradigma de que la presencialidad y el control del horario aseguran la productividad laboral. A partir de la consolidación del trabajo por objetivos cada vez más compañías se permiten innovar y romper los preconceptos para encontrar formatos laborales más eficientes. De hecho, las organizaciones basadas en esquemas productivos más ágiles vienen implementando estos formatos desde tiempos pre pandemia, poniendo el foco en la responsabilidad y autogestión de sus empleados, así como en el valor de la confianza mutua.
“Las empresas innovadoras están fomentando el autoliderazgo, que es el desarrollo de líderes en cualquier rol: no hace falta tener personas a cargo, y repercute positivamente en la vida personal, además de lo laboral. Esta libertad de acción en su metro cuadrado permite mejorar el desempeño individual, sin perder la mirada de los objetivos empresariales y del equipo”, aseguró.
Otro cambio radical del 2023 es que se consolidará el trabajo por objetivos, y no por ‘hora-silla’ en todos los puestos que así lo permitan. El desafío aquí será poner a tono a quienes lideran para que lo sepan gestionar convenientemente, sin caer en el micro-management con exceso de control, que, como se ha probado desde hace décadas, vuelve ineficientes y más burocráticas a las empresas”.